Muchos definen la Web 3.0 como el internet del mañana. Miles de usuarios son hackeados a diario en la web tradicional, pero sobretodo en las grandes empresas que tienen datos bastantes privados e información de todos nosotros, por lo que puede haber una exposición de todos los datos de los usuarios en dicho caso de hackeo. Todo esto podría cambiar en la Web 3 con una mejora en la privacidad y la descentralización de los datos.

La nueva remodelación de Internet

Con la Web 1.0 (principios de la década de los 2000), Internet estaba dominado por los principales creadores de contenido y la mayoría de los usuarios éramos simplemente consumidores. Con la aparición de la Web 2.0 cada vez más usuarios pasaron de consumidores a creadores de contenido y proveedores de ello. Los grandes actores de la industria fueron proporcionando un lugar donde cualquier tipo de contenido se podía compartir.

La Web 3.0 es una actualización de la red, una meta tecnología para software empresarial, un movimiento social de datos abiertos y una nueva generación de Inteligencia Artificial. Todo lo que necesitaremos en uno.

Pongamos como ejemplo con qué pasará con compañías como Facebook, Twitter o Google, compañías centralizadas que serán reemplazadas por plataformas de redes sociales y motores de búsqueda sin ninguna empresa o gran multinacional detrás de ellas.

Ahora llega el turno de las criptomonedas que son territorio de la Web 3.0. Todos hemos oído hablar sobre Bitcoin (la criptomoneda original), la cual fue diseñada como dinero electrónico para el intercambio directo entre usuarios que no necesitaban confiar entre sí o en nadie más. Su «fe» o confianza viene dada por las cadenas de bloques, un libro de contabilidad público mantenido mediante redes informáticas descentralizadas y de código abierto.

Hoy en día existen cientos de miles de tokens diferentes basados en blockchain, que aparecen todos los días y que circulan continuamente en lugares con diferentes grados de regulación y supervisión. Eso es la Web 3.0.

La nueva Web 3.0 utopía o realidad

Muchos empresarios y multimillonarios se «mofan y burlan» del nuevo término de internet en la red social Twitter (Elon Musk, Jack Dorsey…). ¿Dónde está la nueva web 3.0? Se preguntaban ya que no eran capaces de encontrarla.

Elon Musk escribió:

“No estoy sugiriendo que la Web3 sea real (parece más una palabra de moda de marketing que una realidad ahora mismo), solo me pregunto cómo será el futuro dentro de 10, 20 o 30 años” y agregó “el año 2051 suena muy futurista”.

La mayoría de las operaciones de la web actual (o 2.0 si lo preferís) están controladas por gigantes tecnológicos como Google, Microsoft o Amazon, pero la Web 3.0 está totalmente descentralizada donde los datos se distribuyen a través de las redes y ninguna entidad es (o será) propietaria de la información como ahora.

Web 3.0

Para resumiros un poco: «es un término general para muchas ideas dispares que apuntan en la dirección de eliminar a los grandes intermediarios en Internet». En la nueva era que ya se ha iniciado, navegar por la web ya no significaría iniciar sesión en Google, Facebook o Twitter, si no que Web 3.0 tratará de recuperar parte del poder que estas grandes empresas han acumulado a lo largo de los años.

Surgirán nuevas redes sociales, motores de búsqueda y mercados que no tienen jefes supremos en el mundo de la empresa ya que estarán construidos sobre un sistema conocido como blockchain que ya lo respalda Bitcoin y otras criptomonedas.

Blockchain reinventa la forma en que se almacenan y administran los datos, además proporcionan un conjunto único de datos (capa de estado universal) que se gestiona de forma colectiva y descentralizada. Dicha capa de estado única habilita por primera vez una capa de liquidación de valor para Internet.

Nos permite enviar archivos de forma protegida contra copia, lo que permite verdaderas transacciones P2P sin intermediarios, y todo comenzó con la aparición de Bitcoin.

Otras tecnologías que ayudarán y contribuirán a la evolución de Internet además de blockchain son la Realidad Virtual (VR), la Realidad Aumentada (AR), la Inteligencia Artificial (AI) y el Aprendizaje Automático (ML).