Algo que nos ha dejado el virus y la pandemia que estamos viviendo desde hace ya un año, es el teletrabajo y cómo reinventarnos para trabajar en casa. Muchos se preguntarán qué necesito para trabajar desde casa, y desde MR queremos echaros una mano y deciros qué es lo que nosotros tenemos siempre en nuestras casas.

Un problema que tenemos en España es el espacio de las casas y pisos de las grandes ciudades. No es que tengamos un espacio en la mayoría de las casas para dedicar a un despacho o «mini» oficina donde poder trabajar tranquilamente aislados del resto de la casa y distracciones que todos tenemos en nuestros hogares.

Esenciales para trabajar desde casa

Os vamos a comentar unos pocos elementos que todos necesitamos si tenemos que trabajar en casa. Muchos por obligación, otros porque nos gusta tener más libertad y nos organizamos mejor sin un horario fijo, y otros porque la pandemia les ha hecho reinventarse para poder seguir en el mercado laboral.

Ordenador y Equipo Informático: es el primer elemento que hoy en día no puede faltar en el teletrabajo. ¿Quién trabaja en una oficina o en su casa sin él? Muy pocas personas. Necesitaremos un equipo acorde a nuestro empleo y nuestro desempeño. No será el mismo equipo para un diseñador gráfico o web, programador, que para un administrativo o contable. Ambos tendrán que ser funcionales y no «una tartana» del siglo pasado, pero no es necesario un PC Gaming para un comercial.

Fibra + fijo + movil + tv: Hoy en día tan importante (o más) que el propio equipo con el que trabajamos. No es la primera vez que estamos en medio de una conferencia y tenemos contratado un paquete de ADSL en vez de fibra, que hace que veamos congelada la imagen y no podamos desempeñar nuestro trabajo correctamente.
Esenciales para trabajar desde casa
Despacho o espacio 100% dedicado: sí, es posiblemente el aspecto más complicado en muchas de las casas españolas por el espacio que tenemos. Sería genial tener una habitación donde exista un ambiente «laboral» totalmente aislado del resto de la casa, pero no todos podemos tener acceso a ello. Durante esta época, miles de sofás o mesas de comedor se han convertido en salas de trabajo improvisadas, salas de conferencia y lugares donde hemos desempeñado nuestro trabajo.
Silencio: ¡qué complicado es tener silencio en las casas de hoy en día! O vivimos solos o es realmente complicado el poder tener silencio en una casa. ¿Te imaginas tener 2 peques en casa mientras trabajas? Aunque sean los niños más buenos del mundo, seguro que nos distraerán decenas de veces.
Organización: es muy importante organizarse y establecer un horario de trabajo. Sí suena raro, pero no podemos estar disponibles el 100% del día simplemente porque trabajemos desde casa. Podemos (y debemos) fijar un horario en el que desempeñemos nuestro trabajo y el resto dedicarlo al ocio y a la familia.
Vestirnos: suena a coña, pero no. Ese ritual de ducharnos, vestirnos como si fuéramos a salir, muchos expertos dicen que es una de las mejores maneras de aumentar la productividad y poder dar el do de pecho en nuestro trabajo.
Si aún así no podéis trabajar en casa, os recomendamos alguna oficina compartida o coworking, donde es un ambiente laboral más y seguro que encontráis uno cerca de vuestra casa o empresa.