Hoy os vamos a contar una cosa que seguro que nos lleva a controversias y a alguna que otra discusión en el ámbito del marketing digital. Al igual que hicimos con el buzoneo, queremos mostraros otra técnica de marketing que sigue estando de moda y que es una de las mejores formas para mejorar nuestro branding o marca personal: el merchandising.
El merchandising es una opción muy económica y, que si elegimos correctamente el material a regalar, puede hacernos permanecer muchos años en las manos de nuestros posibles clientes. Hay muchos regalos promocionales que están muy trillados y estamos hartos de recibirlos: bolígrafo, carpetas…Pero si de verdad queremos que el regalo sea útil tenemos que ser un poco originales y regalarles algo como paraguas personalizados baratos, USBs (aunque también están muy usados, es una buena opción porque solemos usarlos bastante), una tapa para la cámara de nuestro ordenador portátil…
Qué es el Merchandising
Por si alguno no conoce la definición de Merchandising, os la traemos para que os quede un poco más claro:
El Merchandising es la promoción de la venta de bienes que pueden emplear precios, ofertas especiales, exhibiciones y otras técnicas diseñadas para influir en las decisiones de compra de los consumidores. El concepto de merchandising se basa en presentar los productos en el momento adecuado, en el lugar adecuado, en la cantidad adecuada y al precio adecuado para maximizar las ventas.
Qué factores tener en cuenta en el Merchandising
Si lo que quieres es calar en tu audiencia, salte de lo normal y deja volar tu imaginación. ¿Sinceramente guardarías un bolígrafo cutre de un local? Seguro que no, o si lo guardas es en un sitio donde ni se ve (guantera de un coche). Os vamos a poner una serie de pautas que, si fuerais a hacer algún regalo promocional, deberíais tener en cuenta:
Elige un regalo que se pueda usar. Ya os hemos dado ejemplos antes, pero hay cientos de ellos que puedes elegir.
Las pautas que os recomendamos son pocas, pero es que a medida que vamos a ferias o eventos, nos damos cuenta que no se tiene en cuenta para qué es un regalo promocional. Un regalo promocional tiene que tener un valor para la persona que se lo entregamos y que a la primera de cambio le de reparo tirarlo a la basura.
A nosotros hay cosas que nos dan pena tirar, pero hay otras que sinceramente cuando hacemos una pequeña limpieza, son las primeras en visitar el cubo de reciclaje (si son plástico claro…).